Y El os dio vida a vosotros, que estabais muertos en vuestros delitos y pecados, en los cuales anduvisteis en otro tiempo según la corriente de este mundo, conforme al príncipe de la potestad del aire, el espíritu que ahora opera en los hijos de desobediencia, entre los cuales también todos nosotros en otro tiempo vivíamos en las pasiones de nuestra carne, satisfaciendo los deseos de la carne y de la mente, y éramos por naturaleza hijos de ira, lo mismo que los demás. Efesios 2:1-3 LBLA
Queridos amigos, el apóstol Pablo se está dirigiendo a la iglesia (los creyentes) de Éfeso, les recuerda que ellos y todos nosotros también, seguimos las corrientes de este mundo, viviendo en la carne y siguiendo a Satanás.
Suena extremo, sin embargo en la Biblia dice que todo lo que no es de Dios, es del diablo.
Qué horroroso constatar que cualquiera, antes de ser creyente, vive en una terrible condición, como hijo de ira.
Nos queda arrepentirnos, pedir perdón y reconocer que necesitamos a Jesús desmedidamente.
Que Dios les bendiga con su gracia.