Bendeciré a Jehová en todo tiempo; Su alabanza estará de continuo en mi boca. En Jehová se gloriará mi alma; Lo oirán los mansos, y se alegrarán. Engrandeced a Jehová conmigo, Y exaltemos a una su nombre. Salmos 34:1-3 RVR1960
Queridos amigos, con qué gozo escribe el salmista. Está exaltando a Dios de una manera muy bella, es un ejemplo para todos nosotros, es una invitación para que todos le alabemos.
Bendigamos al Señor en todo tiempo, es decir en todo momento y lugar. Tendré siempre palabras de alabanza en mi boca, lo cual ayuda en gran manera a no decir lo malo.
Mi alma se gloriará en Jehová significa que no tenemos nada de qué gloriarnos a los ojos de Dios, porque toda la gloria es de Él y porque he entendido que ésto es así, me glorío en su grandeza y poder.
La palabra dice que los mansos son bienaventurados, éstos tendrán gran alegría disfrutando en alabanza de la gloria del Señor.
¿Cómo podríamos engrandecer al ser más grande del universo? Alabando y exaltando Su nombre, todos al unísono, reconociendo Su grandeza (y nuestra insignificancia).
Alabemos todos al Creador, quien a pesar de todo se fija en nosotros.
Que Dios les ponga un corazón de alabanza.