Mujer virtuosa, ¿quién la hallará? Porque su estima sobrepasa largamente a la de las piedras preciosas. Proverbios 31:10 RVR1960
Queridos amigos, en un mundo donde Satanás es el príncipe (2 Corintios 4:4, Juan 12;31) los tiempos, valores, costumbres y necesidades cambian. Por ejemplo la mujer moderna ha asumido roles que antes no tenía o no le era permitido tener.
En el afán de conseguir una mejor vida material se olvidan valores, y las funciones específicas para hombre y mujer establecidas por Dios se van solapando de manera tal que unos cumplen la tarea de otros. En muchos casos la mujer de reina del hogar ha pasado a ser también proveedora del hogar, una función que Dios diseñó específicamente para el varón.
El mal trato dado a la mujer durante generaciones ha repercutido en movimientos de reivindicación de sus derechos e incluso se han desarrollado grupos contestatarios agresivos. El feminismo es una clara muestra de la dura reacción.
Vemos que hay poder detrás de las mujeres, de ellas depende cómo canalizarlo. Agradezco a Dios por haberlas creado como son. Bendecidas aquellas que conocen a Dios y pueden ser llamadas virtuosas.
A pesar de la historia no se podría decir que los varones son más pecadores, no es posible diferenciar el grado de pecado de acuerdo al género, tanto varón como mujer son seres caídos.
La naturaleza que Dios dio al varón es diferente a la de la mujer y hace que se diferencien entre sí de muchas maneras. Dichas diferencias promueven que se realce a la mujer virtuosa y se ponga un especial énfasis en las Sagradas Escrituras sobre la mujer rencillosa e insensata.
La virtuosa tiene momentos de contienda y la rencillosa puede mostrar mucha cordura. Hay rencillosas que fuera de su hogar son dulces y tiernas, demostrando además solidaridad y dedicación con quienes deciden.
Algunos dicen que la mujer por su naturaleza es más desprevenida que el hombre, y de esa debilidad se agarra el tentador para seducirla al pecado. Proverbios 9:13 dice que la mujer insensata es alborotadora, es simple e ignorante de las cosas de Dios. Se suele mencionar que es más duro enfrentarse a una mujer necia que a un hombre insensato.
La insensata no tiene límites con su boca y se olvida de toda compostura, no conoce la vergüenza. La sabiduría de Proverbios 21:9; 21:19 y 25:24 enseña que es preferible vivir en un pequeño rincón, incluso en lugar desierto, que con mujer rencillosa e iracunda en una mansión lujosa.
Es mejor evitar las discusiones, peleas y controversias callando la boca con humildad, esperando que el enojo amaine. Ante la agresión están llamadas la misericordia, calma, prudencia y paciencia. Esa es una buena manera de mantener una buena relación o un hogar armonioso.
La boca de la rencillosa se convierte en un arma letal. La solución para muchos es alejarse, pues es mejor estar a solas que compartir con alguien que no permite vivir en paz, por tener una naturaleza insoportable (aplicable a algunos hombres).
Una pasión desenfrenada es dar rienda suelta a la lengua para echar a perder todo. Cuán recomendable es controlar la lengua para no desperdiciar el consuelo que acompaña a una sana relación.
Las contiendas, reclamos y enojos constantes de la mujer rencillosa son parecidos a la gotera continua en tiempo de lluvia. Pretender contenerla es tan incontrolable como querer parar el viento o sujetar el agua entre los dedos (Proverbios 27:15-16). Una lluvia persistente de críticas, exigencias y consejos inadecuados es como la tortura china de la gota de agua.
Se trata de mujeres que no temen a Dios, porque tampoco le conocen. Con sus manos derriban su casa, es decir arruinan a su familia y se destruyen a sí mismas, su actitud soberbia y conducta iracunda les lleva a un mal final. En tanto, la mujer que camina con Dios goza de Su sabiduría y edifica su casa (Proverbios 14:1).
La mujer y su carácter son sopesados en Proverbios 12:4. Una mujer que cuida bien las cosas de su hogar es con seguridad piadosa y prudente; la Biblia la describe como virtuosa (moralmente fuerte) y como corona (honra y consuelo) de su esposo. Por el contrario, la mujer mala hace presa de su marido y lo consume.
La mujer con el carácter de Cristo representa un gran valor dentro de la familia, quizás el más grande. Es el ideal de mujer que todo hombre con sabiduría debe anhelar conocer. Proverbios 11:16 resalta la honra como resultado de la gracia de la mujer. Ella será honrada en la tierra por el hombre y por Dios en el cielo.
Quizás no sea tan difícil hallar mujeres virtuosas como encontrar diamantes debajo de la tierra, pero quien halle una mujer piadosa y temerosa de Dios sépase mucho más rico que el poseedor de una mina de piedras preciosas.
La mujer rencillosa, además suele ser controladora y dominante, es así como resultado de la maldad y egoísmo inherentes de la raza espiritualmente caída que es la humana. Tiene muchos vacíos que quiere llenar haciendo pagar a su entorno cercano.
Benditos aquellos que han sido bendecidos con la gracia de Dios, pues Él es el único que puede llenar todos los vacíos, tanto de la mujer como del hombre.